AL TERMINAR LA CUARENTENA

Al momento de escribir esta columna, la Presidencia de la República de Colombia ha tenido como objetivo, terminar la cuarentena el día 27 de Abril, debido a la pandemia por el virus covid-19 que vivimos en todo el mundo. La ansiedad de estar sin trabajo, sin dinero, sin alimentos y sin futuro se ha tomado a muchos colombianos que desean salir a la calle y reactivar la economía. Personalmente, pienso que será Mayo, el mes más delicado para enfrentar la pandemia del coronavirus en Colombia, y en especial, en la ciudad de Bogotá.
No cabe duda que las personas asintomáticas, es decir, los que tienen el virus y no padecen ningún síntoma de la gripe; tienen un alto potencial de contagiar a otros que puedan tener un sistema inmunológico deteriorado. Por esto mismo, desde que comenzó la epidemia en nuestro país, las instituciones de salud han sido claras en que según estudios, en Colombia podrían haber 4 millones de infectados por el covid-19 (según el Instituto Nacional de Salud). Un 85% de esta población padecerá un simple resfriado de 3 o 4 días, el 10% si será afectado por tos, resfriado y fiebre por unos días; pero un 5% de esta población si tendrá un cuadro bastante complicado que podrá llevar a algunos al hospital. Por lo anterior, es conveniente mentalizarnos que la gripa por el covid-19 nos dará a un grupo de colombianos. Sea el día después del 17 de Abril, en un año o en dos; nos podrá dar. Mentalizarnos que nos infectaremos de covid-19 es la mejor defensa para el miedo colectivo, ese pánico colectivo de no salir, de no volver a generar relaciones humanas. Un miedo que puede llegar a generar, como reacción en cadena, una baja de defensas en nuestro cuerpo. La psiconeuroinmunología es una ciencia que estudia el cómo las repuestas del cerebro ante un estímulo, desencadena también diversas respuestas en glándulas y órganos del cuerpo humano.
De la mano, y siendo muy reiterativo, la importancia de mantener una buena alimentación que genere un buen metabolismo. No es comer mucho. Es comer lo que necesita el cuerpo. Congelar la fruta, guardar en una bolsa de plástico (envolviendo en papel la verdura) en la nevera, para que no se quemen o se dañen, y germinar los granos son “trucos” que nos pueden ayudar tanto para ahorrar como variar nuestra alimentación. Es importante que los abuelos, quienes según las estadísticas son los más vulnerables, tengan en lo posible una alimentación baja en grasas, rica en frutas, granos y cereales; y evitar el exceso de azúcar, gaseosas y lácteos.
De otro lado, y siendo muy importante, es la higiene que todo integrante de la familia debe mantener, si comienza a laborar fuera de casa. El hecho de que los niños, en especial, los abuelos sean “infectados” al tener contacto con quien llega de la calle, es un gran riesgo. Por esto mismo, se recomienda que al llegar, inmediatamente se realice un cambio de ropa y un baño para evitar posibles contagios a la familia. Más aún, cuando se ha movilizado en transporte masivo o ha estado en aglomeraciones en espacios cerrados (en lo posible no asistir). Soy consciente de que suena un poco paranoico estas medidas y consejos. Pero hay que recordar, que una vez más, nos enfrentamos a un virus que no es propio de estas tierras. Es decir, nuestro sistema inmune no lo conoce. Las recomendaciones que damos en esta columna van encaminadas a la protección de los abuelos, que por su avanzada edad, su sistema inmunológico, sus enzimas y algunos nutrientes, no son iguales que los del resto de la familia. Igualmente, hay que recordar que las personas que padecen en la actualidad enfermedades cardiovasculares, diabetes, cáncer, enfermedades autoinmunes y los inmunosuprimidos (trasplantados), también están en un riesgo alto de tener una reacción fuerte frente a la infección por el virus covid-19. A ellos también hay que cuidar de igual forma que a los abuelos. Observando el comportamiento del virus en otros países, y lo que llevamos de tiempo en cuarentena; lo más recomendable es que mantengamos estas normas de higiene y cuidado con nuestros familiares más vulnerables, por lo menos dos meses más.
Quiero también hacer un llamado a la emergencia que en salud pública, se presenta en todo el país, entorno al aumento de la violencia intrafamiliar. Según una investigación publicada por el periódico EL TIEMPO del 18 de Abril, se ha duplicado el número de llamadas (2.054) a la policía por violencia intrafamiliar entre el 20 de marzo al 7 de abril; siendo el doble de lo atendido a diario en dos meses previos al inicio de la cuarentena. Resulta impactante saber que el lugar que debería ser más seguro para las mujeres y los niños, sea el más peligroso. En lo personal, pienso que allí es donde radica toda la base de la violencia del país. El alcohol, la ignorancia y algunas “costumbres”, y creencias que se han heredado, sin razón alguna, por madres y abuelas de generación en generación, han hecho que este problema aún perdure en pleno siglo XXI.
Finalmente, esperamos que las cosas siempre sean mejor que ayer. Que cada uno de nosotros tenga una razón, unido al amor, antes de actuar. Resulta inverosímil, absurdo y ridículo que existan grupos de personas que acosan a quienes se encuentran “infectados” por el virus covid-19. Sucedió en la ciudad de Neiva, con dos hermanas que estando en cuarentena en el hospital, los vecinos apedrearon sus casas. El bullying siempre es signo de ignorancia e intolerancia. Y eso, sin contar los varios casos de discriminación e intolerancia con médicos y enfermeras en los conjuntos residenciales o edificios donde viven.
Qué otras medidas piensa Usted tomar para los próximas días si va a salir a laborar? Que aspecto o circunstancia ha sido el más difícil para Usted durante la cuarentena? Déjanos tu comentario.

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